Declaración de Fe

I. Santísima Trinidad

Creo en un Dios único, vivo y verdadero. Todopoderoso Omnipotente, Omnisciente y Omnipresente. Creador y sustentador de todas las cosas visibles e invisibles. Cónsono con esto, creo que este único Dios se ha revelado a los hombres en tres personas de igual substancia, poder, y gloria: EL PADRE, EL HIJO (VERBO) Y EL ESPIRITU SANTO; y estos tres son un solo Dios.

(Genesis 1:1, Exodo 3:13-15; 33:20, Deuteronomio 6:4, Salmo 90:2; 124:24, Isaias 9:6, Jeremias 10:10, Juan 1:1-2; 4:24; 10:30; 16:13, Efesios 2:18, Filipenses 2:6, Colosenses 1:16, lera. Timoteo 1:17, lera. De Juan 5:7 y Apocalipsis 19:13).

II. El Hijo de Dios

Creo que Jesucristo es el unigénito Hijo del Padre que fue concebido por obra y gracia del Espíritu Santo. Nació de María la virgen, habitó entre nosotros y fue su gloria, la cual recibió del Padre, lleno de gracia y de verdad. Siendo Dios se hizo hombre y esta condición se humilló hasta lo sumo, y después de haber hecho tanto bien a la humanidad, fue crucificado, muerto y sepultado. Pero al tercer día resucitó de entre los muertos y está sentado a la diestra del Padre intercediendo por nosotros. Con su muerte vino a ser el único y perfecto sacrificio agradable delante de Dios para la salvación. Perdonando, no solamente el pecado original del hombre, sino también los pecados actuales del hombre, reconciliándonos con Dios.

(Juan 3:16, Mateo 1:18, Lucas 2:6-7, Juan 1:14, Filipenses 2:5-9, Hechos 10:38, Mateo 27:32-50, Juan 19:38-42, Filipenses 3:20, Tito 1:14, I era. Juan 4:14, lera. Tesalonicensts 5:23, Hebrero 2:14-15, Gilatas 3:13; I era. Pedro 2:24, Juan 14:27, Mateo 3:11, Mateo 1:21 y Romanos 5:1).

III. Espíritu Santo

Creo que el Espíritu Santo es la tercera persona de la Trinidad. Al igual que el Padre y el Hijo tiene la misma sustancia, majestad y gloria. Nos guia a tada verdad y a toda justicia. Santifica al creyente y capacita a la iglesia por medio de dones o carismas espirituales para el buen funcionamiento. Da testimonio a nuestro espíritu de que somos hijos de Dios. Fue enviado de parte del Padre, a través del Hijo el dia de Pentecostés.  (Job 33:4, Mateo 28:19, Juan 4:24-26, Hechos 2:1-12, Romanos 8.9, 2da. Corintios 2:4, Hechos 6:5,8, &:39-40, Romanos 8:26, lra. Corintios 12:1-11, Romanos 8:11, 16 y 1 era Corintios 14).

IV. Sagradas Escrituras

Creo que La Biblia es la úinica, suficiente, segura, e infalible regla del conocimiento de la fe y obediencia salvadora. Creo en la autoridad de las Santas Escrituras por lo que deben ser creidas y obedecidas. La autoridad de las Escrituras no depende del testimonio de ningún hombre o iglesia, sino enteramente de Dios quien en sí mismo, es la verdad y autor. Las Escrituras deben ser creidas porque son la palabra de Dios.

Todo hijo de Dios está comprometido a leer, escudriñar y confesar la Palabra de Dios diariamente. Creo en vivirla, estudiaria y predicarla.

Utilizo la versión en español original de Casiodoro de Reina 1569, Cipriano de Valera 1610, Reina y Valera Revisada en 1909, Revisón de 1960, y Reina Valera Gómez para estudiar y preparar los mensajes que predicamos.

V. Salvación

Somos tenidos por justos ante la presencia de Dios únicamente mediante los méritos de nuestro Señor y Salvador Jesucristo. Esto es mediante la fe en El y no por obras para que nadie se gloríe.